Ponle… Que el objeto de tu afecto te parta la madre… OK, pasa… Pero que el clavo que te está intentando sacar al otro te la parta… Ya es demasiado! Ya para el medio día de ayer estaba yo devastada emocionalmente (pa variar), y es que cuando te das cuenta de que el tiempo que has invertido se acaba de ir al caño molesta muuuchoo… Muuuuchooo…!!! Y ya deja tú pensar en el afecto dado (totalmente al pedo) sino en, por ejemplo, todo el tiempo que invertí arreglándome para verme divina cada vez que salíamos, los trapos nuevos que compré para los dates, el flequito prolijo siempre, el manicure impecable, el jabón de algas reafirmante… No no no… Lo que más bronca me da (más bronca), es que en estos casos antes de enojarme con este pedazo de pendejo, me enojo conmigo por haber caído otra vez.
En fin… No lo pude evitar y lloré. El Guapo Gonchis entró casual a mi oficina a preguntarme cómo estaba y me le solté a llorar desconsoladamente, no sin antes aclarar “perdóname Guapo Gonchis, se me juntó el lavado con el planchado y tengo síndrome pre-menstrual”. Después vino Ruby con sus sabias frases: “las penas con alcohol son menos”, y fue así como nos fuimos a emborrachar toda la comitiva de la oficina para celebrar a la Chapis que cumplía una primavera más. Cerveza, Clericot, Vodka, Tequila y unas cuantas “cucarachas” fueron lo que necesité para darme cuenta una vez más que puedo prescindir de casi cualquier hombre, pero de Gay Lussac… jamás… JAMÁS!!!
Noche de copas… Noche loca… A dormir plácida en mi camita eléctrica, amanecer con un juguito de verduras sabiamente preparado por mi mamá, comer tortas ahogadas, michelada curativa, y un mensaje del Vampiro Bipolar: “MissU”. Ahhh… Si ya digo yo: la vida no apesta, mi debacle amorosa sí.
En fin… No lo pude evitar y lloré. El Guapo Gonchis entró casual a mi oficina a preguntarme cómo estaba y me le solté a llorar desconsoladamente, no sin antes aclarar “perdóname Guapo Gonchis, se me juntó el lavado con el planchado y tengo síndrome pre-menstrual”. Después vino Ruby con sus sabias frases: “las penas con alcohol son menos”, y fue así como nos fuimos a emborrachar toda la comitiva de la oficina para celebrar a la Chapis que cumplía una primavera más. Cerveza, Clericot, Vodka, Tequila y unas cuantas “cucarachas” fueron lo que necesité para darme cuenta una vez más que puedo prescindir de casi cualquier hombre, pero de Gay Lussac… jamás… JAMÁS!!!
Noche de copas… Noche loca… A dormir plácida en mi camita eléctrica, amanecer con un juguito de verduras sabiamente preparado por mi mamá, comer tortas ahogadas, michelada curativa, y un mensaje del Vampiro Bipolar: “MissU”. Ahhh… Si ya digo yo: la vida no apesta, mi debacle amorosa sí.
1 comment:
jajaja a mi tambien me pasa en que primero me enojo conmigo... es que parece que a una le dijeran que los reyes son los padres y volviera a creer que realmente existen y solo tuvimos una falsa percepcion por unos minutos/dias/meses.
anoche un amigo que volvio de estar trabajando unas semanas en arabia saudita me decia que alla esta prohibido el alcohol y hay que comprarlo de contrabando y es increible la cantidad de plata que tiene esa gente y mi teoria era que la plata la hacian de lo que se ahorraban en alcohol... no se si sera asi, pero si asi fuera... cuantas penas tiene esa gente? como se deshagoan? (en este caso seria ahogan) =P
para pensarlo eh... (?)
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