Friday, August 01, 2008

I know St. Peter won´t call my name...


Si hay algo que las lavadoras han llegado a demostrar a este mundo es que todo en esta vida tiene ciclos.  Yo pasé de lavado en seco a centrifugado en un lapso de 3 meses, con todo y mucha agua y exprimido de por medio.

Dentro de mi lista de prioriodades, esto quedó más o menos en el - 100000000000000  (menos cien trillones) y no es que a alguien le preocupe o que el mundo se haya perdido de algo valioso, sino que me deshice de una costumbre que realmente disfruto ( no es como mi rutina para dejar de hacer ejercicio...), esto pasa por otro lado.  

Ayer en un merodeo por los blogs que siempre leía me encontré con el último post del Niño Pol que me dejó helada, decía algo así como: "Gracias, aquí existió el mejor blog que jamás hayan leído" (qué voy a hacer sin su soberbia!).  El Niño Pol fue para mí lo que para la nación fue Juan Escutia.

Me dió tristeza y miedo (creo firmemente que esto, junto con el desprendimiento temprano del glaciar, es el principio del fin del mundo), ante tal valentía y aceptando mi dejo, decidí seguir sus pasos.   Pero para variar, me arrepentí, (lo cual era completamente predecible). Si no puedo ni siquiera tirar los boletos de cine de las películas que me gustan,  sería ilógico tirar 2 años de tonteras a la basura.  

Así que dediqué la tarde de este primer día de Agosto a restaurarlo, ajustarlo y volver a empezar, algo que ha pasado conmigo ultimamente.





3 comments:

eliana said...

Me alegro! =)

azm said...

YUJUUUUUUUUUUUU VOLVISTE!!!!!!! por cierto que buena canción

María Giuseppina said...

Me encanta volver a leerte!!!!! Y con nuevo look!!
Te mando un abrazote!!!
Pipe!!!